En estos días se ha celebrado el
debate sobre el Estado de la Nación en el que el gran ausente ha sido la
Energía, es decir, que se ha hecho durante estos más de tres años y como
recorremos la ruta trazada, cuanto hemos conseguido de lo que nos propusimos
como país y cuanto hemos conseguido de lo que nos comprometimos con Europa.
A nadie se nos escapa la
importancia que para España tiene su estrategia energética imbricada con su
desarrollo económico y social y, por lo tanto, hay que plantearse como una
situación anómala la falta de cualquier reseña en un debate de fin de legislatura
del estado del sector energético.
Una explicación de esta anomalía
política la podemos encontrar en el planteamiento con que se inició la legislatura
en enero del 2012 mediante el RD 1/2012 de 27 de enero, por el que se procede a
la suspensión de los procedimientos de preasignación de retribución y a la
supresión de los incentivos económicos para nuevas instalaciones de producción
de energía eléctrica a partir de cogeneración, fuentes de energía renovables y
residuos.
“El déficit tarifario constituye
en sí mismo una barrera para el adecuado desarrollo del sector en su conjunto y
en particular para la continuación de las políticas de fomento a la producción
eléctrica a partir de fuentes de energía renovable y alta eficiencia.”
El párrafo anterior, sacado de la
exposición de motivos del RD 1/2012, expresa de manera inequívoca lo que
posteriormente ha sucedido durante los tres años transcurridos, una dedicación
de la administración a solventar el déficit de tarifa eléctrico y una
dedicación de gran parte de los agentes en posicionarse en la defensa de sus
legítimos intereses y otros esperan poder entrar en gran parte como emprendedores.
El sector eléctrico se ha
convertido en el protagonista del sector energético por sí mismo y por su
implicación con las energías renovables y de alta eficiencia.
Otro de los puntos relevantes, también
del sector eléctrico, ha sido y es la prorroga o cierre de la central nuclear
de Garoña, que de alguna forma marca el devenir de la energía nuclear en
nuestro país, sobre este tema, más importante que las fechas, ha sido la
decisión del cierre sin permiso de la administración de la actividad de la
central, situación no resuelta que todavía perdura y no parece que sea de
atención pública. Lo que supuso ese plante de las dos empresas más importantes
del sector eléctrico fue valorado y sancionado muy acertadamente por la CNMC.
La existencia de dos secretarios
de energía con posiciones diferenciadas en los procedimientos que no en el
objetivo retrasaron y generaron más caos en los procesos de negociación, se pasó
de un tímido inicio en la introducción de la fiscalidad verde, a una solución
por la vía tradicional de ingresos y gastos.
En diciembre del 2013 culminó una
ruptura entre el lobby eléctrico y la administración que se manifestó en la
subasta Cesur que tuvo que ser anulada posteriormente a su celebración por el
nivel de precios alcanzado, que estaban fuera de rango de lo que políticamente pudiera
ser acertado, como consecuencia de la anulación se improvisa una solución para
sustituir a las subastas trimestrales que genera un periodo transitorio en el
que todavía estamos y que afecta a, nada más y menos, que a la medida de la
energía consumida. Hubo una curiosa coincidencia al coincidir la citada subasta con la aprobación de la nueva ley del sector eléctrico.
Todo lo anterior y otras circunstancias
han generado el no desarrollo de: eficiencia energética, autoconsumo, energías renovables,
todo lo que viene englobándose bajo la etiqueta de energía verde, actividades
con un gran potencial de desarrollo y con un muy importante potencial de medios
disponibles y preparados para actuar en tanto en cuanto la administración
posibilite e impuse su implantación a imagen de todos los países de nuestro
entorno.
Tendremos que esperar a una nueva administración para acometer los desafíos que la sociedad tiene planteados en este sector y que su desarrollo, sin duda, será uno de los pilares del cambio que gran parte de la sociedad solicita y necesita.